Sacrifice es un juego de ordenador de estrategia en tiempo desarrollado por la empresa Shiny Entertainment y publicado en el año 2000. Como ya avanzábamos la semana pasada, esta empresa se caracteriza por lo "curioso" de algunos de sus títulos, y éste no es una excepción.

En Sacrifice, nosotros controlamos a un mago que estará al servicio de un dios (y no siempre es necesariamente el mismo) y que deberá enfrentarse a otros como él. Nuestro mago será capaz de invocar criaturas, lanzar hechizos defensivos, de ataque, de transporte... y todo ello para lograr la misión que le sea propuesta, la cual normalmente será del tipo de que nuestro dios quiere fastidiar a otro que no le cae demasiado bien...

La gracia de principal de esta aventura es que, aún siendo un juego de estrategia (deberemos ir consiguiendo unidades para eliminar a nuestro contrincante), no lo es de la forma típica: los principales recursos que necesitaremos serán almas, las cuales podremos conseguir al eliminar a las tropas del mago contrincante (al igual que él), sin olvidar el maná, que si bien se nos recarga automáticamente, nos vendrá bastante bien el tener diferentes "manantiales" para hacerlo de forma más rápida. Además, también se puede decir que combina ciertos elementos de acción al tener la posibilidad nuestro mago de ser uno más en el campo de batalla realizando ataques con diferentes hechizos.

La temática que guía el juego es la de que una serie de dioses están relativamente enemistados entre ellos (algunos más que otros) y cada uno tiene su visión correcta de cómo debería ser el mundo, por lo que constantemente tratarán de convercernos para que apoyemos su causa y realicemos sus misiones. Por ello, se puede decir que el juego tiene una gran componente no lineal al permitirnos constantemente elegir a quién hacer caso, lo cual lo hace bastante interesante.

Dejando de lado la historia y yendo un poco al apartado técnico, en Sacrifice nos movemos es una tercera persona al estilo Tomb Raider en escenarios de tipo abierto y con gran cantidad de elementos que no permitían, allá por el 2000, que el juego funcionara en una máquina "cualquiera". Quizás, como una pega al juego que está relacionada con este sistema de control, es que las diferentes criaturas pueden ser bastante complicadas de utilizar, pudiendo incluso llegar a perder algunas en ciertas ocasiones.

Espero que el juego os haya parecido interesante y, como siempre, esperamos vuestros comentarios!!!!

EDIT: Se me olvidaba la nota!!!! Yo le pondría un 9 por la gran originalidad del concepto del juego, a pesar del, desde mi punto de vista, "costoso" sistema de manejo de las unidades.